Colágeno

Iniciamos un nuevo año y, como siempre, es momento de marcarse nuevos propósitos: dejar de fumar, perder peso, comer más sano o ir al gimnasio. Aunque estos son los más tradicionales, si hay otro objetivo muy frecuente durante esta época del año es, sin duda, el de cuidarse un poco más.

Tomar un suplemento nutricional para mejorar la piel es quizás otra de las determinaciones para mejorar el estado de la piel y las articulaciones en general.

Uno de los suplementos que más vemos en la farmacia y está más de moda es el colágeno. Todos tomamos colágeno, es increíble la cantidad de colágeno que podemos encontrar en la farmacia, y no solo en la farmacia, sino también en las tiendas de dietética, en parafarmacias y hasta en supermercados.

Pero ante tal variedad, es muy grande la confusión de cual comprar, ¿cuál será el mejor y el que más se adapte a nuestras necesidades?

Deberíamos distinguir si lo deseamos para la piel, para la flacidez o para otras acciones. Los suplementos no solo suelen tener colágeno, algunos contienen hialurónico, magnesio, vitaminas como la C, B o incluso probióticos.

Hay diferentes tipos de colágeno, de hecho ya he hablado del tema muchas veces en varios posts y en un apartado de mi libro en el que solo hablo del colágeno.

Sin embargo, creo que es más fácil ir a lo practico y a lo rápido cuando vamos a comprar y con unas pocas premisas escogeremos el más adecuado.

Tener en cuenta cuál es nuestro objetivo, para qué lo queremos tomar y qué esperamos al tomarlo es fundamental: para las articulaciones, para la musculatura, para la piel …

Sí, hay marcas que indican que el colágeno que venden es adecuado para todo eso, pero debemos ser más cautos y saber qué es lo que vamos a comprar y tomar. Es diferente un producto para las articulaciones en los que el tipo de colágeno es distinto y los otros componentes que va a llevar que el colágeno para mejorar la piel, la luminosidad y la flacidez, en esto influye además del tipo de colágeno, los otros componentes que va a llevar el producto.