La mastitis sin lactancia o periductal es aquella que se da en las mujeres que no están dando el pecho, esta es más difícil de detectar que la mastitis puerperal que es la que se produce en las mujeres que acaban de dar a luz.
Este tipo de mastitis suele estar en una parte concreta del pecho y suele ser con frecuencia cerca del pezón.
Si quieres conocer todo sobre la mastitis sin lactancia, y por qué se produce ¡Sigue leyendo te lo contamos todo!
¿Qué es la mastitis sin lactancia?
La mastitis sin lactancia es una infección o traumatismo producido en el pecho de la mujer y que se produce en aquellas que no están dando el pecho. En algunos casos también puede aparecer en hombres o en niños, aunque es menos común.
La edad en la es más probable sufrir de mastitis sin lactancia es:
- En mujeres menores de 30 años.
- Entre la edad comprendida entre 50 y 60 años.
Y esta suele ser más difícil de detectar que la mastitis puerperal, que es la que se produce en las mujeres que están en lactancia.
¿Por qué se puede producir la mastitis sin lactancia?
La mastitis sin lactancia suele producirse por una dilatación en los conductos galactóforos, donde se acumula secreción en la zona de los senos que tienden a infectarse.
Se suele provocar una ruptura en estas vías y el líquido sale al tejido mamario, lo que hace que se produzca una inflamación.
Diagnóstico más complicado que la mastitis puerperal
Esta mastitis tiene un diagnóstico bastante difícil, ya que no existe el antecedente de la lactancia. Y en algunos casos es necesaria una ecografía ya que con una mamografía puede que no se identifique dicha infección
Otras causas que pueden provocar la mastitis sin lactancia son:
- Alteraciones que se producen en el sistema endocrino, padecer de mamas fibroquísticas.
- Por la fricción constante de los senos, o el consumo constante de tabaco
Síntomas de que puedes estar sufriendo mastitis sin lactancia
La mastitis puede representarse de diversas formas, y no a todo el que la padece de la misma manera, pero los síntomas más comunes de la mastitis sin lactancia o periductal son:
- Dolor o irritación en los senos, y especialmente en la zona afectada, que suele notarse como enrojecimiento de forma triangular, con vértice en el pezón.
- Una sensación de picazón y pesadez en los senos.
- Pueden aparecer masas que previamente no estaban en nuestros senos, con diferentes tamaños.
- Calor que se nota al tacto en la piel.
- Absceso en los senos.
- Síntomas como, fiebre, náuseas, vómitos o ciertos dolores musculares.
Cuando estos dolores son persistentes, o se agravan es recomendable acudir al especialista, ya que cuanto antes se detecte mejor.
Tratamiento cuando se diagnostica la mastitis sin lactancia
Este tipo de mastitis en muchos casos leves, desaparece sola, pero principalmente suele tratarse con antiinflamatorios, y/o antibióticos recomendados por el médico especialista.
En casos más graves puede verse indicada una intervención para poder ser tratada la mastitis sin lactancia, ya que esta puede hacerse crónica.
Este proceso se extirpan los conductos galactóforos que son los que causan la enfermedad.
En ello radica la importancia de ser detectada a tiempo, y prevenir que se convierta en una mastitis crónica, por lo que las revisiones ginecológicas son esenciales.
Para evitar esta mastitis crónica se aconseja llevar un estilo de vida saludable y cuidar la piel.
Llevar un estilo de vida saludable
Reduciendo o eliminando por completo el consumo de tabaco, así como especial cuidado con el consumo de grasas y cafeína.
Cuidar la piel
El cuidado de la piel, una correcta higiene, así como utilizar prendas que favorezcan la transpiración.
En cualquier caso, si crees que puedes estar padeciendo de mastitis, o notas alguna alteración en los senos, nuestra recomendación es que acudas a tu ginecólogo de inmediato, para poder descartar cualquier causa.
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