¡No podía faltar en las tardes de sofá, manta y peli! El chocolate a la taza es el complemento perfecto para desayunar, merendar o tomar un snack a cualquier hora porque sea el momento del día que sea, ¡siempre apetece un chocolate caliente!
Más espeso, más líquido, con especias o nubes, sin olvidarnos del dulce por excelencia que le acompaña: ¡los churros!
Si eres una apasionada del chocolate a la taza y quieres elaborarlo en casa, vamos a repasar los mejores trucos para disfrutar de un dulce típico de los meses más fríos del año y universalmente conocido.
¡Apréndete todos los consejos para saber cómo hacer chocolate a la taza!
1. ¿Cuál es el mejor chocolate para taza? No cualquiera se presta
Es un lema recurrente dentro del mundo de los trucos de cocina: los ingredientes, si son buenos de base, garantizan el éxito de nuestras recetas. Así que primero de todo, antes de empezar a relamerte, elige un buen chocolate y puede ser en polvo o en tableta, ambos quedan ideales para servirlos espesos y a la taza.
A la hora de escogerlo asegúrate de que sea de calidad, si no obtendremos un chocolate astringente, amargo y con poco aroma. Un truco para orientarte y acertar en la adquisición es comprobar que el producto tenga alto contenido en cacao, no contenga harinas o espesantes y no tenga azúcar.
No es estrictamente necesario comprar un tipo de leche en específico para elaborar el chocolate, pero si tienes leche entera, ¡mejor que mejor! La leche entera es ideal para que el chocolate a la taza tenga más sabor y quede más espeso.
A la hora de empezar el proceso de elaboración, no hiervas las onzas de chocolate o el polvo de cacao directamente en la olla, ya que se caramelizaría y acabaría quemándose.
Una opción fantástica para que eso no ocurra es calentar la leche en la olla y verter las onzas de chocolate cuando esté caliente, pero no hirviendo.
Si optas por comprar cacao en polvo, primero debes mezclarlo y fundirlo en leche fría. Es importante que esté fría para que los componentes de la leche absorban el cacao a medida que la mezcla se calienta en la misma olla.
3. Incorpora canela y dale el toque especial
Un truco que hace que tu chocolate a la taza sea realmente inconfundible y exquisito es añadirle especias. Hay quien le añade un toque de menta, y en México, por ejemplo, haciendo gala de sus tradiciones culinarias, le incorporan algunas gotitas de picante.
Si tu paladar no se atreve, te recomendamos que aromatices tu chocolate a la taza con sabores más neutros, aunque también afrodisíacos como la canela o la vainilla.
Recuerda que este proceso de aromatización debe hacerse al principio, cuando la leche se está calentando, justo antes de incorporar el chocolate para fundir.
4. Mide el azúcar y ajusta la cantidad
Recomendamos hacerse con una base de cacao 100% puro para que no haya interferencias a la hora de medir la cantidad de azúcar que deberemos incorporar a nuestro chocolate a la taza.
Partimos de la base de que nuestro chocolate no contiene azúcar, así que el momento idóneo para endulzar la mezcla será cuando se esté calentando la leche en la olla, antes de introducir el chocolate y justo en el momento de incorporar las especias que comentábamos en el apartado anterior, aunque si prefieres no innovar y elaborar un chocolate tradicional, ¡también quedará de 10!
En el caso de que tengas un chocolate 70 u 80% no hay ningún problema, porque en este tipo de chocolates predomina el cacao como base, y no el azúcar, por lo que no encontraremos apenas gramos de azúcar incorporados que puedan endulzar demasiado nuestro chocolate a la taza.
5. ¿Te gusta espeso? ¡Este es nuestro secreto!
Si eres de los que le gusta el chocolate bien espesito que casi necesitas una batidora para moverlo, ¡te vamos a contar el secreto para que te quede así de cremoso!
En realidad no es un solo truco y es que un buen chocolate a la taza tiene muchos secretos, ¡con razón está tan delicioso!
El primer truco es dejar hervir el tiempo suficiente para que los productos espesen. Al menos, tiene que estar hirviendo durante un minuto a máxima potencia y luego lo retiraremos del fuego.
También recomendamos elaborar el chocolate a la taza en una olla profunda, para así evitar que cuando hierva, salpique.
El otro gran secreto y el que de verdad garantizará el éxito de nuestro chocolate a la taza es no dejar de remover con una cuchara de madera, o bien unas varillas de cocina, desde que incorporamos el chocolate a la olla.
De esta forma, no nos encontraremos con grumos y tendremos un chocolate espeso uniforme, ¡a la vez que irresistible!
No caigas en el error de conservar el chocolate en el congelador, ya que cuando quieras consumirlo, al descongelarlo, se cuarteará y soltará agua, por lo que la mezcla espesa quedará cortada.
Tampoco es necesario que el chocolate a la taza, una vez elaborado, guarde reposo (como podrás leer en algunas recetas), aunque sí que lo recomendaríamos si lo haces servir como base para una crema de chocolate.
6. Decora y acompáñalo con las mejores opciones
¡Ya tenemos nuestro chocolate listo! ¿Con qué podemos acompañarlo? No hay tradición culinaria más española que los churros con chocolate, así que esta será nuestra primera opción.
Hay fechas señaladas en nuestro calendario en las que no puede faltar este dulce en nuestra semana, sobre todo, en Navidad, para mojar melindros o como acompañante del sabroso roscón de Reyes.
Aunque existen otras alternativas, como incorporarle un poquito de nata por encima (el típico suizo) o también decorarlo con nubes de golosina.
¿Lo has probado alguna vez?
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