La nueva factura de la luz, en vigor desde el 1 de junio, ha fijado un nuevo horario valle entre la medianoche y las 8 de la mañana, además de fines de semana y festivos, y algunos se preguntan si esto provocará cambios de hábitos para acoplarse a él y ahorrar, como poner la lavadora a medianoche o planchar de madrugada.
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Aunque ha habido un pequeño aumento en el consumo, todavía es demasiado pronto para poder llegar a una conclusión, según aseguran fuentes del sector eléctrico, que estiman que hacen falta algunas semanas para poder observar los cambios en las tendencias. Pero mientras te dejamos las claves para que puedas ir midiendo el impacto de esta medida en el consumo doméstico.
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El consumo en hora valle de la primera jornada con la nueva factura ha aumentado un 3% respecto al martes anterior, el 25 de mayo, y un 2% mayor al de dos semanas antes, el 18 de mayo, según las cifras que recoge Red Eléctrica de España (REE).
Pero en números absolutos el consumo ha variado poco: desde la medianoche hasta las 8 horas de la madrugada del 1 de junio se consumieron 202.033 MW, frente a los 195.627 MW del 25 de mayo o a los 198.173 MW del 18 de mayo.
Sin embargo, desde el sector advierten que hay que contextualizar este ligero aumento de la demanda en la época del año en la que estamos, en la que es normal que se produzcan estos incrementos. Desde REE señalan que hay que esperar aún semanas para empezar a sacar alguna conclusión sobre el impacto de la nueva tarifa.
Si quieres analizar cómo evoluciona esta tendencia, la REE cuenta con una página en la que se puede ver la demanda real, la estimada y la programada cada 10 minutos en cada uno de los sistemas (peninsular e insulares) y comparar con otras fechas.
El consumo en horas valle
El cambio en los tramos puede hacer que “a las 10 de la mañana de un viernes van a pagar casi el triple, más o menos, que a las 10 de la mañana de un sábado”, explicaba Jorge Morales, director de Próxima Energía, a Newtral.es en este texto donde abordamos lo que cambia en la nueva factura.
Ahora, todos los consumidores han pasado a tener un peaje con discriminación horaria en los términos de potencia y energía, con tres tramos:
- Punta: entre las 10:00 y las 14:00 horas, y entre las 18:00 y las 22:00 horas.
- Llano: de 8:00 a 10:00 horas, de 14:00 a 18:00 horas y entre las 22:00 y las 24:00 horas.
- Valle: entre las 24:00 y las 8:00 horas, fines de semana y festivos.
Esto hace que el precio de la luz por la potencia contratada en periodo de valle es un 95% inferior al del periodo de punta, según explica la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
¿Para qué sirve la diferenciación de precios?
Con este cambio el Gobierno busca incentivar el desplazamiento del consumo de energía como el de lavadoras o lavavajillas a periodos de menor demanda para evitar hacer más inversiones en la red.
Por eso, el organismo recomienda evitar encender varios aparatos a la vez (como por ejemplo, lavadora y cocina o plancha) para ajustar la potencia contratada. Solo evitar el encendido de todos los aparatos a la vez “podría inducir un ahorro de entre 200 € y 300 € anuales, en el escenario de equipamiento con potencia promedio”, según la CNMC.
De hecho, la plancha es uno de los aparatos de mayor consumo y más fácilmente desplazable, según este organismo, que ha calculado que desplazar el planchado a periodos fuera de punta podría ahorrar hasta 38,44 euros en la factura.
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