jueves, 1 de agosto de 2019

Madre, Flor enloquecida. Este libro me lo regaló Sol Pilar

¡El se encargó de romper el diario de la vida que hasta allí había escrito la madre - florcon tanto amor¡ Ahora , abandonada en aquella ciudad de sufrimiento, esta madre-flor sueña su pasado y, con manos temblorosas , intenta unir los pedazo de aquel diario que fue deshaciendo el dolor. Pero no,ya no son aquellas manos tiernas y firme que un día abrazaron la vida de su vida. Y la flor evoca lentamente: ¡Dios mío, he sido madre! Aunque sienta toda la ingratitud que me hiere, soy como otras mujeres. Vida, mírame!, me enfrento contigo. tengo un corazón para amar y mis entrañas también han sido cuna de vida. Mi regazo ya calentó cuerpos infantiles, míos, míos. Pero eso fue en otros tiempos, cuando yo era madre y era bueno tener y pertenecer; tener mis pequeños capullos que se abrían día a día en mi presencia y pertenecer  a esas vidas que eran mías más que de nadie. Pero hoy ya no soy madre. Soy, nada más una flor enloquecida, una más, abandonada entre tantas (y  esto es lo que más me hiere), un núYmero es mi señal de identifivación,¡Y piensan que yo no lo entiendo!  No tendré nunca más el noble título de madre, porque hasta aquellos que nacieron de mí se averguenzan de mi existencia. Si me visitan, es apenas una fugaz presencia que intento agarrar para retenerla siempre, poque sé que no volverán más.
No, nadie entenderá nunca lo que es ser flor enloquecida, lo que es vivir la angustia de no tener nada,¡ni aquello que fue mío porque lo engendré en mis entrañas! Aquí estoy, sola, con estos pedazos rasgados, rotos, deshechos de un diario de amor que no existirá nunca más. Lo que hay en mí, lo que está a mi alrededor nada más es un vacío    de dolor que me atormenta, que me grita:<<. Nunca más serás madre! Miro las paredes que me rodean y veo nueve cuadros pintados, cada uno con su color. Veo nueve meses y en ellos un capullo que dentro de mí fue creciendo. Pero al llegar al último no veo nada más. La pared se deshace como el torrente de mis lagrimas locas. Sólo veo un abismo. Y lejos , muy lejos, mi sueño de madre que sucumbe en la cuesta de la locura.¡Oh, cuánta añoranza siento al oír la palabra suave y calurosa: madre! Si alguien me llamara madre, aunque sólo fueras  tú, silencio que me escuchas, aunque fueras tú dolor que me fustigas, aunque fueras tú , Hospitalaria que me amas ... Nacerián alas en mi corazón, en el seno de mi dolor engendraría la alegría y, entonces, seria madre.
Madre de nadie, sí madre de algo que me pertenecería,que sería solo mío, que yo merecería en el regazo del sueño dándole un nombre.
Por favor, adivina...inventa ...percibe...
Tu que vives a mi lado, que pasas corriendo por las calles de mi vida, nunca percibirás el drama que me angustia, ese drama casi diluido en las cenizas pernnes de mi locura. Nunca sabrás que soy mujer, porque me ves como una flor mortecina. Nunca sabrás que tambien soy capaz de amar porque crees que mi corazón está roto, dividido, vacío. No sabrás nunca que yo sería más feliz si un día te acercaras a mi y, sencillamente, me llamaras¡ madre!
No lo sabrás nunca porque yo no  seré
capaz de decirtelo. Pero por favor,¡adivínalo inventalo, percíbelo! Espero que tú Hopitalaria, me dejes contar este sue
ño que da calor a mi ser. Así, un día, aunque solo sea por un momento. yo¡volveré a ser madre!
Este libro me lo regaló Sol Pilar hace años, me gustaría que lo pudiera leer haré más escritos de este libro. Sol Pilar muchas gracias por el regalo de este libro. Con todo mi cariño. Sole
Resultado de imagen de monjas con el hábito blanco

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