Erase una vez una niña que se llamaba María, siempre estudiaba para sacar buenas notas y tener una carrera como maestra. Todas sus compañeras le decían que era una empollona, hasta que un día dejó de estudiar. Al día siguiente sus padres vieron que la niña no se comportaba bien en clase y sacaba malas notas, decidieron castIgarla y que no saliera de casa. María estaba triste, no hacía nada ni siquiera los deberes que le mandaban, se volvió una niña muy rebelde se canso de que la llamaran empollona y lo hablo con sus padres. Los padres comprendieron todo y entendieron de repente todo el comportamiento de su hija.
No hay comentarios:
Publicar un comentario