El ex líder de Ciudadanos confesó en 'El Hormiguero' cómo se sintió al abandonar la política y reivindicó que se puede dimitir, «no pasa nada».
Cerrar la puerta a la vida pública no impidió que el abogado fuera perseguido por la prensa, en este caso la del corazón. «Uno no elige de quién se enamora, aunque yo he elegido bien –argumentó sobre su relación con la cantante Malú-. Entiendo que un artista o un político tenga mucho interés, pero en su trabajo. ¿Por qué no puedo ir a la playa con mi familia o llevar a mi niña al médico porque me siguen los fotógrafos? Hay que cambiar la ley, solo pido que respeten mi intimidad», advirtió al tiempo que aseguraba que los 'paparazzis' acosan también a su madre y a su suegra. Y para ilustrar su ruego reveló una anécdota: «Fue uno de los momentos más surrealistas de mi vida. Estábamos comiendo con nuestras familias en casa, y mi pareja y yo empezamos a recibir mensajes preguntándonos si estábamos bien, y diciéndonos que lo sentían mucho», contaba. Al parecer se había publicado que la artista y él habían roto. «Me lo tomé a guasa, en realidad estábamos brindando por nuestra felicidad», observó.
En cuanto a una posible vuelta a la política, Rivera afirmó que no se lo plantea. «La política actual española no me atrae. No me gusta ni me apetece, no quiero volver», manifestó rotundo. Motos bromeó diciéndole que en el sector privado se gana «más panoja». «La política de este país no da para hacerte rico si eres honrado», resolvió el entrevistado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario