sábado, 16 de marzo de 2019

Limpiar las paredes de casa

No hay nada como una casa con las paredes recién pintadas. No obstante, no podemos pintar nuestras casas cada año para que luzcan igual que el primer día. Por ello, es recomendable hacer una limpieza de las paredes a fondo al menos tres veces al año y, por supuesto, hacer un mantenimiento, al menos mensual, de las mismas. La mayoría de la gente no le da importancia a la limpieza de las paredes, no obstante es un elemento más de la casa y acumula la misma suciedad, por lo que es vital mantenerlas limpias para poder tener un hogar limpio y saludable.
Si nuestras paredes están pintadas tendremos que tener en cuenta el color de la pintura a la hora de hacer la limpieza. Además, también dependerá de si vamos a limpiar una pared lisa o una pared que tenga gotelé. Antes de empezar a limpiar una pared, pon en el suelo papeles de periódico, para que no se manche el suelo con el agua o el producto que utilices y tapa con sábanas viejas todos los muebles. En el caso de la limpieza de las paredes pintadas lisas y de color debemos seguir los siguientes pasos:
  1. Quitar el polvo de la pared: para ello debes pasar de arriba abajo por la pared un cepillo de filamentos suaves, un plumero, una escoba o la aspiradora para eliminar el polvo y las posibles telarañas que haya.
  2. Quitar las manchas: dependiendo del tipo de mancha deberás usar una técnica u otra. Para saber si el método que utilizas es el correcto, haz una prueba en una zona pequeña de la pared, así po drás saber si lo estás haciendo de forma adecuada. Si las manchas que tenemos en la pared son de aceite, lo más recomendable es limpiarlas con agua caliente, detergente lavavajillas y un chorro de amoniaco y enjuagarlo con agua tibia. Hazlo siempre con mucho cuidado y mueve la esponja con movimientos circulares. Utiliza siempre una esponja suave y ten a mano un paño limpio para secarlo rápidamente. En el caso de las manchas que puedan dejar los muebles, el roce de los zapatos o nuestras propias manos, podemos eliminarlas utilizando una goma de borrar.
  3. Si nuestra pared no tiene manchas graves y lo único que necesita es un lavado, podemos limpiarlo con agua tibia y jabón líquido. Después solo tendremos que aclararla con agua limpia y secarla con un paño. Recuerda hacerlo por franjas y de abajo arriba, así evitarás chorretones que puedan dejar manchas en tu pared.
  4. Por el contrario, si nuestra pared tiene manchas muy severas y la mezcla de agua y jabón líquido no ha sido suficiente para eliminar la suciedad; podemos disolver una taza de bicarbonato de sodio (unos 100 gramos) en cuatro litros de agua y aplicarlo sobre la mancha con movimientos circulares. Después, únicamente tendrás que aclararlo con agua tibia
  5. Quita el polvo al igual que si se tratara de una pared de color.
  6. Para la limpieza de las paredes blancas la mejor solución es acercarnos al supermercado más cercano y comprar lo que se conoce como borradores mágicos. Son esponjas especiales que son capaces de eliminar la suciedad de cualquier superficie. Sumerge esta esponja en agua y escúrrela bien, después aplícala sobre la mancha como si fuese un borrador y verás cómo las manchas desaparecen de forma inmediata. Después puedes realizar un lavado de toda la pared con agua y jabón para acabar con todos los restos de suciedad que hayan podido quedar.
  7. Si estamos ante una pared blanca de pintura plástica, la mejor forma de limpiarla es utilizando agua tibia, una esponja suave (que no sea de ningún color, puesto que puede manchar la pared) y jabón líquido. Sigue el mismo proceso que el que te hemos recomendado en la parte de paredes de color: frota de forma circular, límpiala de abajo arriba y ve secando todo lo que mojes de manera inmediata para evitar que queden manchas.
  8. impiar una pared lisa puede parecer mucho más sencillo que hacer la limpieza de una pared de gotelé. No obstante, no os asustéis, el proceso es muy similar y tampoco resulta mucho más complicado. Hay que tener mucho cuidado al limpiar este tipo de paredes, puesto que puedes quitar el gotelé sin darte cuenta. Toma nota de lo que hay que hacer para limpiar este tipo de paredes.
    1. Quita el polvo con un plumero, no obstante utiliza uno que sea muy suave, pero a la vez resistente, para que no se queden restos de las plumas enganchados en la pared.
    2. Para quitar las manchas existen varios trucos. En primer lugar puedes utilizar un cepillo para el pelo (el que se suele utilizar para los bebés es perfecto) o también valdría un cepillo para la ropa con las cerdas muy suaves. En un cubo, hacemos una mezcla de agua con jabón neutro líquido y con ayuda del cepillo vamos aplicándolo sobre la pared, despacio y con mucha paciencia, en zonas pequeñas. Después aclaramos la zona con agua tibia y con ayuda de otro cepillo de características similares para, finalmente, secarlo con un paño limpio. En caso de manchas más leves, podemos usar un trapo que no suelte pelusa y un poco de agua con detergente lavavajillas.
    3. En la mayoría de nuestras casas, la cocina y los cuartos de baño tienen este tipo de paredes, por lo que saber cómo limpiarlas también es muy importante. Ya te hemos contado antes cómo hay que limpiar las juntas de los azulejos, pues bien, llega el momento de utilizar estos trucos y consejos. Una vez que las juntas estén limpias, pasaremos a limpiar los azulejos o baldosas. Para ello, podemos utilizar diferentes productos como la lejía o el amoniaco disueltos en agua. Además, como no podría ser de otra manera, limpiar con vinagre los azulejos también es una buena opción puesto que devolverá a nuestras paredes de baldosas o azulejos el brillo que tenían el primer día.

  9. ¿Cómo hacer la limpieza de las paredes de madera?

    En muchas casas nos encontraremos con paredes recubiertas con paneles de madera. Pues bien, su limpieza tampoco nos va a resultar un problema. El mejor método para limpiar paredes de este tipo es utilizando lanilla de acero y una mezcla de alcohol rebajado con agua. Recuerda frotar suavemente y siempre en la dirección de las vetas de madera. Acabarás con el polvo y la suciedad de forma rápida y cómoda.

    ¿Cómo hacer la limpieza de las paredes empapeladas?

    En cuanto a las paredes empapeladas también es muy importante conocer los métodos específicos que hay que utilizar para su limpieza. A continuación vamos a mostrarte las diferentes formas que existen de hacerlo. Recuerda que siempre antes de empezar a limpiar las paredes, deberás quitar el polvo ayudándote de un plumero o de un trapo limpio y seco
    1. Paredes con empapelado viejo y sin acabado: utiliza una esponja específica de lavado en seco, frota la pared con movimientos largos de arriba abajo para eliminar la suciedad.
    2. Paredes con empapelado lavable: con una esponja natural y jabón líquido diluido en agua, frota la pared con delicadeza y evitando que el papel se humedezca puesto que puede dañarse. Recuerda siempre hacer una pequeña prueba en un lugar poco visible, para saber si puede causar algún daño.
    En este tipo de paredes no vas a poder utilizar productos abrasivos como la lejía, el alcohol o el amoniaco puesto que dañarán el acabado. Evita siempre humedecer demasiado la zona, puesto que solo conseguirás debilitar el papel.

    Para mantener tus paredes limpias durante la mayor cantidad de tiempo posible, lo más eficaz es quitarlas el polvo y eliminar las manchas más visibles al menos una vez al mes. Con estos consejos para la limpieza de las paredes te asegurarás de que tu casa luzca siempre como nueva. Recuerda que un hogar que se mantiene limpio es sinónimo de un hogar saludable.
  10. Resultado de imagen de fotos de paredes pintadas

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