Las fuentes históricas son documentos escritos, testimonios orales u objetos materiales que le aportan al historiador información de interés para sus investigaciones y sus tareas de interpretación de hechos pasados.
Los conocimientos históricos deben estar basados en fuentes verídicas y fiables. Por ello, las fuentes históricas funcionan como prueba y huella de lo
acontecido en otros tiempos.
En este sentido, son de ayuda principal para el historiador textos escritos como la prensa, las cartas, los diarios personales, y los documentos de instituciones públicas y privadas.
No obstante, las actividades humanas son tan variadas que dejan tras de sí evidencias diversas, y que también están sujetas a comentarios históricos. Entonces, podemos contar como documentos a las fotografías, mapas, pinturas, grabaciones, y claro está, a los libros, entre muchas otras fuentes de información histórica.
Por supuesto, todas estas fuentes deben ser revisadas desde una perspectiva crítica, con interrogaciones y contrastes. Esto para evitar una visión deformada o falsa del pasado.
Fuentes primarias de información histórica
Las fuentes históricas primarias son las originadas cuando ocurren los acontecimientos que describen. Entre estas incluimos a los documentos, testimonios u objetos producidos tanto por participantes como por testigos de los hechos.
Las fuentes primarias genuinas no han sido alteradas desde su creación. Para comprenderlas es necesario conocer su contexto histórico y situarse, en la medida de lo posible, en las formas de pensar de sus autores.
Fuentes primarias escritas
- Los documentos oficiales emanados de instituciones públicas y privadas.
- Documentos personales como cartas, diarios y memorias.
- Publicaciones periódicas como los diarios.
- Obras literarias.
Fuentes primarias tangibles e iconográficas
- Edificaciones y objetos de la vida común de otras épocas.
- Pinturas, fotografías e imágenes con valor histórico en general.
Vea también
Fuentes secundarias de información histórica
Las fuentes históricas secundarias son los estudios hechos a partir de la información hallada en las fuentes primarias. Estas son consideradas "testimonios de segunda mano", pues han sido creadas tiempo después de haber ocurrido los acontecimientos.
En las fuentes históricas secundarias a menudo encontramos análisis e interpretaciones de los hechos que estudian. Además, suelen tener listas de referencias que ayudan a los historiadores a conseguir más fuentes relevantes para sus investigaciones.
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