Los últimos escándalos alimenticios, como en la carne de caballo o las amburgesas chinas, han devuelto al centro de atención los fraudes cárnicos. La crisis de las vacas locas, las hormonas o las dioxinas en el pollo también pesan en el recuerdo de los consumidores, que no terminan de fiarse de la carne que comen.
Para hacer frente a esta situación, la oficina Europea de asociaciones de consumidores BEUC ha puesto en marcha la campaña podemos confiar en nuestra carne que a lo largo de varios meses, aspira a conseguir una legislación más exigente que ofrezca más garantías al consumidor. En un primer momento,se centrará en conseguir que las etiquetas informen dobre el origen de las carne includas en productos procesados, como una salchicha o un nugget de pollo, pues el sonado fraude del caballo reveló también que los animales y sus derivados viajan mucho, dentro y fuera de la UE, antes de llegar a nuestros platos.
Para colaborar en esta campaña, envíenos por twitter meatorigen o Facebook etiquetas con buenos y malos ejemplos de la indicación del origen, como un producto que muestra la bandera de un país y está elaborado en otro. si quiere conocer más sobre la campaña, entre en www.ocu.org confianza alimentos.
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